Don Alberto Ried Silva, Padre bomberil y fundador de nuestro Cuerpo de Bomberos de Ñuñoa. Don Alberto falleció un 5 de mayo de 1965 a sólo días de cumplir el Cuerpo de Bomberos de Ñuñoa, su último tesoro, los 32 años de su fundación. Sus enseñanzas, ricas en nobleza, tradición, ímpetu y disciplina fueron innumerables, destacan " La Vida es lo que Hacemos de Ella" o "No hay imposibles para la Capacidad del hombre". En la piedra de la Primera Compañía del Cuerpo de Bomberos de Ñuñoa de la que fue Voluntario hasta los últimos días de su Vida, legó:
“Derroché mi dinero y riqueza espiritual porque me dijo el tiempo que este enorme silencio tenía que llegar”