Hoy, 3 de mayo, el Cuerpo de Bomberos de Ñuñoa destaca el trabajo de sus voluntarios que, sin descanso fueron en ayuda de sus semejantes y participaron en las pesadas labores de búsqueda y rescate, tras el aluvión en la zona de la Quebrada de Macul, que hace 28 años marcó para siempre a los vecinos de sectores como Tobalaba, Lo Hermida, Peñalolén y La Florida, dejando un saldo de 26 fallecidos, 8 desaparecidos y más de 30 mil pobladores damnificados.