Luego de 34 meses desde la última vez que la institución convocó a la tradicional ceremonia de entrega de premios de constancia, este sábado 26 de marzo, el Cuerpo de Bomberos de Ñuñoa, en el campo de entrenamiento de la Cuarta Compañía, procedió a la realización del solemne acto de reconocimiento a los voluntarios, voluntarias y personal rentado, que se hicieron acreedores a ello, en el período junio 2020 a mayo 2021 y que, debido a la pandemia, no pudo realizarse en el contexto del aniversario institucional en el mes de mayo.

La ceremonia contó con la participación de la Alcaldesa de Ñuñoa, Emilia Rios Saavedra y el Alcalde de la Florida, Rodolfo Carter Fernández, además de representantes de los Alcaldes de La Reina y Macul. Estuvo presidida por nuestro Superintendente Gabriel Moya Venegas, encontrándose presentes miembros del Honorable Directorio y los Capitanes de las Compañías. Por medidas sanitarias vigentes esta vez solo concurrieron los voluntarios que recibían sus distinciones y el acto fue transmitido a través de las redes sociales de la institución para conocimiento de voluntarios, voluntarias, brigadieres, familiares y amigos.
Para iniciar la ceremonia el Secretario General, Roberto Sepúlveda Toro, solicitó la venia del Superintendente, procediéndose a la interpretación del Himno Nacional y a la entrega de los premios de constancia por 5, 10, 15, 20, 25 y 30 años de servicio, acto seguido, la institución rindió un sentido homenaje a los once voluntarios fallecidos entre junio de 2020 y mayo de 2021, algunos de los cuales, a raíz de la pandemia, no pudieron recibir los honores de despedida tradicional que se brinda a los bombero en el último adiós.

Luego del sentido homenaje que incluyó un toque de sirena del cuartel, se reinició la entrega de los reconocimientos, correspondiendo premiar a los bomberos por sus 35, 40, 45, 50, 55 y 60 años de trayectoria prestando servicio en las comunas de ÑUÑOA, LA REINA, MACUL, PEÑALOLÉN y LA FLORIDA.
Al hacer uso de la palabra el Superintendente envió un saludo a “las mujeres y hombres que, con esfuerzo y profesionalismo realizan su permanente servicio a la comunidad, reconociendo en cada uno de ellos su entrega y voluntad”, instando a cada integrante de la institución, a seguir trabajando unidos en “esta labor voluntaria, abnegada y social, que ha sabido perdurar y desarrollarse, hasta reunir bajo el mismo propósito a más de mil cincuenta hombres y mujeres, diversos por cierto pero no permitiendo generar diferencias de género ni conflicto de pensamiento que nos desvíen de nuestro ideal y objetivo que no es otro que Servir, sin esperar a cambio más recompensa que la satisfacción de entregar el mejor esfuerzo para realizar nuestro trabajo en pos de una sociedad que nos reconoce y nos valora”, concluyó.